Ingredientes:
2 tarrinas de queso mascarpone.
1 paquete de lenguas de gato/bizcochos.
3 huevos.
1 pizca de sal.
2 claras.
1/2 taza de azúcar.
2 cucharadas de café.
1 taza de agua caliente.
*opcional*
1 taponcito de esencia de vainilla
cacao en polvo
Elaboración:
En una taza vamos a calentar el agua, cuando esté caliente la vertemos en un bol junto con las dos cucharadas de café y apartamos.
En un bol separamos las yemas y las mezclamos junto con el azúcar hasta que quede una mezcla homogénea.
En otro bol vamos a añadir las 5 claras (la de los huevos + las 2 que se necesitan) junto con una pizca de sal y batimos hasta dejarlas en punto de nieve, es decir, cuando le des vuelta al bol, las claras no se caigan.
Ahora añadiremos a la mezcla de las yemas las dos tarrinas de queso mascarpone (junto con la esencia de vainilla) y batimos hasta que quede una mezcla homogénea. Cuando la tengamos vamos añadiendo poco a poco las claras y con un movimiento envolvente vamos integrándolas a la mezcla. Cuando tengamos la mezcla hecha, vamos a proceder a montarla.
Vamos a coger los bizcochos y los vamos a sumergir en el café *no lo dejéis mucho tiempo si no se hablandarán* y los vamos a ir colocando en el molde, creando la base de la tarta.
A continuación, añadimos una capa de la mezcla y otra de bizcochos bañados en café y así hasta que o se te acabe la mezcla o el molde se llene por completo.
Cuando acabes, puedes espolvorear con ayuda de un colador cacao en polvo, cuando ya lo hayas hecho mételo en el frigorífico por 6-7 horas.
Cuando llegue el momento con la ayuda de un cuchillo perfilas los bordes, sacas el molde y listo para servir.